jueves, 31 de marzo de 2011

La Junta impugnará en Luxemburgo el final de los incentivos en el año 2018

Fuente: la-cronica.net  --  David Rubio / León

La Junta pretende con esta medida que la minería consiga estabilidad en el futuro. J.M. LÓPEZ

Las soluciones que se han encontrado hasta ahora son “eventuales”, según Villanueva
 
El vicepresidente de la Junta y consejero de Economía y Empleo, Tomás Villanueva, anunció ayer que la Junta tiene previsto impugnar el reglamento de ayudas al carbón nacional ante el Tribunal Europeo de la Competencia, con sede en Luxemburgo, con el fin de conseguir que los incentivos al sector se prorroguen más allá de 2018, fecha límite aprobada en la UE.

Se trata de una medida que la Junta toma tras haberse puesto en contacto con el Ministerio de Industria, a quien remitió un comunicado en el que explicaba que “tanto la patronal alemana como la patronal española nos trasladan que ningún estado miembro, tampoco España, ha llevado al Comité de Representantes Permanentes en la UE, la propuesta de que en la reunión del Consejo se debata y se vote que las empresas mineras que pasen a ser rentables en el período de ayudas que se fije en el nuevo Reglamento, no tengan que devolver las ayudas ni cerrar al finalizar dicho período”.

Según Villanueva, “hay que evitar a toda costa que la minería se extinga por completo ya que el problema de su continuidad no se ha resuelto aún y no hay que confundirse”. A su juicio, “las explotaciones sólo pueden ser viables si prosiguen en el tiempo los incentivos a la producción y la quema de mineral autóctono en las centrales térmicas. El carbón se debe mantener como una energía estratégica”. Villanueva recordó que los problemas que vive el sector del carbón derivan de la decisión hace dos años de Sebastián de suprimir los incentivos para quemar carbón en las térmicas, “una situación que tras muchos avatares ha podido ser solucionada recientemente, pero de forma eventual y sin garantías de futuro. No se ha hecho una buena negociación y tampoco se ha puesto demasiado interés en las reuniones mantenidas”.

Según el comunicado que Villanueva envió al ministro, “nos parece obvio que no tendría sentido que una empresa que logra entrar en rentabilidad gracias a las ayudas de Estado, deba cerrar o devolver las ayudas una vez lograda esa rentabilidad”.

Carbunión, previsiblemente, aprobará el próximo martes en su junta de gobierno que también impugnará el final de los incentivos en el año 2018.

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